Aquí está mi palmatum deshojo, después de la poda efectuada en mayo.
Lo compré en un centro comercial, como cualquier novato, y al aprender un poco más de bonsáis, me di cuenta que era un palo con sus dos ramas principales y el ápice cortados con motosierra, y algunas ramas muy jóvenes creciendo en desorden.
Con esta primera poda de su futuro diseño, lo que me gustaría conseguir, es conicidad en el tronco, para mi es lo más importante ahora, y como tardaré muchos años en conseguirlo, espero poderle ramificar bien, y convertirle en un bonsái normal, y no en un mutilado por manos poco piadosas.
Y como ya saben ustedes, mientras tanto toca mimarle mucho, con su tierra adecuada, abono, la rica agua y el esplendoroso sol, pero no el de verano, que lo fulmina…